gorkula.com
Están grabando Chicago Fire en el barrio
Desde que me vine a vivir a Chicago, cada día pienso que vivo en una película. A veces comedia, a veces de terror, pero todo aquí es de película.

Me habían avisado de que es muy normal el corte de calles por grabación de anuncios, series y películas pero todavía no lo había experimentado aquí. Sí que lo viví en Barcelona y Los Ángeles.

Simulated smoke + fire


Filmin in progress


En Humboldt Blvd, a la altura de Palmer Square, pusieron un letrero gigante avisando. Las fotos son un poco malas porque es complicado echar una foto a algo que parpadea. En el pie de foto he dejado escrito el mensaje completo.

También se puede ver un camión de bomberos. No sé si es de la grabación o no, porque a diario pasan un montón.



Durante varios días pudimos ver varios tipo de máquinas y vehículos que no vemos a diario. A pesar de todo el despliegue he de decir que no hubo más ruido del habitual.

La casa tenía falsas quemaduras y ventanas rotas.


La casa en la que grabaron está en Humboldt Blvd, entre Palmer y Armitage. Creo que grabaron por algún otro sitio, pero no cotilleé tanto.

Por la noche fue cuando echaron humo, aunque no fue nada espectacular. Imagino que lo arreglarán todo en edición.

Desde nuestra casa se podían ver las luces y el humo pero no la casa. Estuvieron hasta pasada la media noche. Sin contexto parecía que hubiese llegado una nave espacial.



Pegaron notas informativas en los árboles. Pero solo en los que estaban en el tramo cortado. Tenías que invadir la zona de grabación para leerlos.



Trajeron coches y otros vehículos de la época (¿en qué año transcurre Chicago Fire?).

No vi el rodaje en sí, ya que vivimos a cierta distancia de la zona, aunque lo suficientemente cerca como para pasar andando varias veces al día.

El mayor impacto que tuvo el rodaje en nuestras vidas fue el parking. Normalmente no hay mucho problema para aparcar en la zona. A veces has de dar un par de vueltas o a parcar un par de calles más allá. Ahora había un bloque entero ocupado por camiones.

Durante esos días las temperaturas en la zona eran de entre -20° y 0°C. Muchos días la máxima estaba bajo cero.
30 Jan - Sin comentarios - chicago, tv
Desde hace años intento llevar un logbook en el que apunto diariamente lo que he hecho. A modo lista, sin extenderme demasiado.

En 2022 escribí casi todos los días, menos un par. En 2023 hay meses enteros vacíos. Para 2024 voy a intentar llenar todo, aunque no tenga ganas.


2023 lo empecé a tope. Motivado. Se puede ver en la pegatina que elegí para la cubierta. Pero me fui desinflando por el camino. El optimismo venía porque en breve me darían el permiso de trabajo. La espera se alargó hasta casi mitad del año. La otra mitad la pasé aplicando y recibiendo rechazos. Uno tras otro. Más de 100.

2024 lo he empezado bastante negativo. Me cuesta creer que pueda ser peor que 2023 pero la vida está cargada de sorpresas.

Espero que 2024 sea un buen año aunque mis ánimos a día 1 de enero estén a dos metros bajo tierra.

Solo tengo dos propósitos de año nuevo: llegar con vida a final de año y conseguir un trabajo digno.
01 Jan - Sin comentarios - ego


He salido a pasear y me he encontrado una bala en la acera de enfrente de casa. Hace un tiempo me encontré un casquillo. Pensé que lo había publicado por aquí pero parece ser que no.

Ayer vi un coche ardiendo en la autopista. No quiero ponerme fatalista.
18 Dec - Sin comentarios - chicago
No tengo claro cuál es el porcentaje del tiempo diario que paso hablando español o inglés. Libros, tv y conversaciones del día a día suelen ser en inglés. Spanglish en casa. Español por whatsapp.

Por algún motivo que desconozco empiezo muchas historias diciendo “it’s funny that…” y luego digo algo que no es “funny at all”. No tengo ni idea de por qué lo hago. No me gusta.

Mi inglés ha mejorado mucho y mi español ha empeorado. En líneas generales, estoy confundido.
10 Dec - Sin comentarios -
Los snacks “de fuera” siempre van muy caros
En Valencia abrió hace muchos años una tienda llamada Taste of America. Era el típico sitio donde la gente iba a por una Coca-Cola de cereza o vainilla.

La única vez que fui fue en primavera de 2022 y compré unos Pop Tarts para enseñarles a unos amigos.

Un poco antes empezaron a abrir más tiendas por el estilo. Una enfrente de la Estación del Norte y otra en la Plaza de la Reina. Entré a buscar Flaming Hot Cheetos y los tenían a 10€. Podía esperar a volver a Chicago.

Esta noche me he encontrado una tienda parecida en Chicago, con snacks sobre todo mexicanos y asiáticos.





Ningún producto tenía el precio puesto. Sabía que iba a ser caro. He dado un par de vueltas y me he decidido por un Kit-Kat de boniato. Le he preguntado al dependiente. $18. Lo he vuelto a dejar y nos hemos ido sin comprar nada.

Ahora buscando en la web he visto que online los venden a $12. A ese precio tal vez los hubiese comprado. Aunque me siguen pareciendo carísimos.

Una vez probé varios Kit-Kat de sabores raros cuando un chico japonés que conocí en Los Angeles vino a visitarme a Barcelona. Me trajo un buen surtido de cosas que el sabía que no había probado.

Algún día espero poder ir a Japón y probar algunas cosas más.
02 Dec - Sin comentarios - comida